Lo primero que deberíamos hacer con esa frase de “recuperar la figura” es quitarle un poco de presión. Porque sí, tu cuerpo ha cambiado. Y sí, puedes acompañarlo para que recupere tono, equilibrio y energía. Pero no hay prisa. No hay un cronómetro marcando los minutos que tardas en volver a “ser tú”, porque tú nunca has dejado de serlo. Solo que ahora eres tú… con superpoderes.
Después del parto, el cuerpo empieza una recuperación compleja: órganos que vuelven a su sitio, músculos que se han estirado como chicles, hormonas que bajan como una montaña rusa y un sistema emocional en plena transformación. Todo eso merece respeto, mimo y cuidados reales. No dietas imposibles ni ejercicios extremos, sino rutinas adaptadas, buena alimentación, descanso (sí, aunque sea a ratitos) y, sobre todo, una conexión contigo misma.
En este artículo te explicamos qué procesos físicos están en marcha después del parto, cuánto pueden tardar, qué tipo de ejercicios ayudan realmente a recuperar la figura, y cómo cuidar tu suelo pélvico, tu barriga y tu bienestar mental. Porque cuando te cuidas por dentro, eso también se nota por fuera. Vamos paso a paso, sin culpas, sin filtros, pero con mucha conciencia.

¿Qué significa realmente “recuperar la figura” tras el parto?
Cuando hablamos de recuperar la figura tras el parto, lo primero que deberíamos hacer es preguntarnos: ¿qué figura? ¿La de antes del embarazo? ¿La de hace diez años? ¿La que creemos que deberíamos tener según las redes sociales?
Spoiler: ninguna de esas es la respuesta correcta.

Recuperar la figura no debería significar volver a encajar en unos vaqueros o borrar las huellas de lo que acaba de vivir tu cuerpo. Debería ser más bien una invitación a reconectar con tu cuerpo, a escucharlo, a cuidarlo y a fortalecerlo desde la conciencia. Porque ha pasado por una de las experiencias más intensas y transformadoras que puede vivir un ser humano.
Tu abdomen se ha expandido, tus órganos han cambiado de lugar, tus músculos han hecho de tripas corazón (literalmente) y tu piel, tus huesos y tus hormonas han colaborado en un trabajo titánico. Así que no se trata de borrar eso, sino de acompañar el proceso de vuelta al equilibrio. Y eso incluye tanto lo físico como lo emocional.
En este te daremos herramientas y pautas para ayudarte a que tu cuerpo se recupere —sí, también estéticamente— desde un lugar real y amable. Porque recuperar la figura es mucho más que recuperar una talla. Es sentirte bien contigo misma en este nuevo cuerpo que ahora es hogar para dos.
¿Qué cambios físicos vive el cuerpo después del parto?
Después de dar a luz, el cuerpo no “vuelve a la normalidad” con un clic. De hecho, lo que ocurre es más parecido a una obra de ingeniería que se desmonta pieza a pieza para reorganizarse desde cero. Tu cuerpo no está roto, está en reconstrucción. Y eso lleva tiempo.
Estos son algunos de los cambios más importantes que están sucediendo en tu cuerpo:
- El útero necesita entre 6 y 8 semanas para volver a su tamaño original. Durante el embarazo pasa de medir unos 8 cm a 32 cm aproximadamente. Así que no, no es raro que sigas teniendo tripita después del parto.
- Los órganos abdominales se recolocan poco a poco. Durante el embarazo, el intestino, el estómago y otros órganos se movieron para dejar espacio al bebé. Ahora están volviendo a su sitio… pero no lo hacen de forma inmediata.
- La musculatura abdominal se ha estirado (y mucho). Especialmente el músculo recto abdominal, que en muchos casos sufre lo que se conoce como diástasis abdominal, una separación de los músculos del abdomen que puede afectar al tono, a la postura e incluso al suelo pélvico.
- El suelo pélvico está más débil. Este conjunto de músculos que sostiene los órganos internos se ha visto sometido a una enorme presión durante el embarazo y el parto, tanto si ha sido vaginal como por cesárea.
- Las hormonas cambian radicalmente. Niveles de estrógeno, progesterona, prolactina… todo se reajusta, y eso afecta tanto a tu cuerpo físico como a tu estado emocional.
- La retención de líquidos y la hinchazón son frecuentes. Y pueden durar semanas. La circulación también necesita tiempo para normalizarse.

Además de esto, muchas mujeres notan cambios en el pelo, la piel, el apetito o el sueño. Todo forma parte del mismo proceso: tu cuerpo se está reorganizando después de un esfuerzo descomunal.
¿La buena noticia? Hay muchas cosas que puedes hacer para acompañarlo en ese camino, pero ninguna de ellas empieza con “castigarte” para volver a estar como antes. Empieza por entenderlo, respetarlo y cuidarlo.
¿Cuánto tiempo puede tardar el cuerpo en recuperarse?
La pregunta del millón. Y la respuesta es: depende. No es lo que una quiere escuchar, lo sabemos. Pero es que el cuerpo postparto no viene con fecha de caducidad ni con cronómetro incorporado. Y menos mal, la verdad.
Hay quien en tres meses se siente fuerte, ligera y con energía, y hay quien necesita más de un año para empezar a reconocerse frente al espejo. Ambas cosas son igual de válidas. Porque lo importante no es “volver a ser como antes”, sino sentirte bien en este nuevo cuerpo que ha gestado y dado a luz a una vida.
¿De qué depende el tiempo que se tarda en “recuperar la figura”?
- Del tipo de parto: un parto vaginal no es lo mismo que una cesárea, y ambos tienen tiempos de recuperación diferentes.
- De tu nivel de actividad física antes y durante el embarazo. Cuanto más activo esté tu cuerpo, más recursos tiene para reorganizarse.
- De si estás dando el pecho o no. La lactancia influye en las hormonas y en la pérdida de grasa corporal, pero también puede agotar energéticamente.
- De cómo te alimentas, cómo duermes (cuando puedes), cómo te mueves y cómo te sientes.
- Del apoyo que tienes alrededor. Porque sentirse sostenida también ayuda al cuerpo a soltar tensiones y regenerarse.
No hay un único camino ni una meta concreta. Tu proceso de recuperación es tuyo y merece ser respetado, sin comparaciones. Lo que sí puedes hacer es poner a tu cuerpo en las mejores condiciones posibles para que se recupere de forma segura y progresiva. En los siguientes apartados te damos claves prácticas para ello.
Ejercicio tras el parto: cómo, cuándo y por qué ayuda a recuperar la figura
Si estás pensando en volver a entrenar para recuperar la figura, lo primero es poner el freno de mano. Porque no se trata de “sudarlo todo” ni de lanzarte a hacer abdominales como si no hubiera un mañana. El ejercicio postparto es una herramienta poderosa, sí, pero solo si se hace con cabeza y en el orden correcto.
¿Cuándo empezar?
Depende de cómo te sientas, pero en general:
- Tanto si ha sido un parto vaginal o por cesárea, sin complicaciones, puedes empezar con ejercicios suaves de respiración, activación del core y suelo pélvico a partir de la segunda semana. En este vídeo te ampliamos toda la información relacionada con este tema: “Cuándo empezar a hacer ejercicio después del parto“.
Antes de cualquier ejercicio “fitness” necesitas reconstruir la base: el suelo pélvico y la faja abdominal. Es como reparar los cimientos antes de redecorar la casa.
¿Por dónde empezar?
👉 Hipopresivos: son una joya en el postparto. Ayudan a fortalecer el suelo pélvico, reducir la diástasis abdominal y mejorar la postura. Tenemos un artículo completo sobre ellos que puedes leer aquí.
👉 Ejercicios postparto adaptados: sin impacto, respetuosos con el suelo pélvico y enfocados en recuperar la diástasis abdominal. Te dejamos una guía y rutina recomendada aquí.
👉 Ejercicios para la diástasis: si tienes separación abdominal, es fundamental trabajarla de forma específica. Aquí te explicamos cómo detectarla y tratarla: “6 ejercicios clave para disminuir la diástasis abdominal”.
👉 Cuidado con el “más es mejor”, en el postparto no funciona así: hacer deporte demasiado pronto o de forma incorrecta puede agravar la diástasis, causar escapes urinarios o generar lesiones innecesarias.
Recuperar la figura no es hacer más, más rápido. Es hacer mejor, más consciente. Y sobre todo, escuchar a tu cuerpo en cada fase. Ya habrá tiempo de volver al running, al HIIT o al gimnasio. Ahora se trata de construir una base sólida, funcional y amable contigo misma.
Alimentación: qué comer para cuidar tu cuerpo y ayudar a su recuperación
¿Te suena eso de “comes por dos”? Pues en el postparto, la frase sigue teniendo sentido… solo que ahora comes para nutrir a dos cuerpos que están en plena transformación: el tuyo y, si estás dando el pecho, el de tu bebé. Así que sí: lo que comes tiene un impacto directo en cómo te sientes, cómo te recuperas y en cómo tu cuerpo se va reorganizando.
Pero tranquilidad: no necesitas una dieta estricta para recuperar la figura, ni eliminar todos los carbohidratos del planeta, ni hacer ayunos eternos. Lo que tu cuerpo necesita ahora es nutrición de verdad, no restricciones.

Algunas claves sencillas para comer mejor en esta etapa:
- Prioriza alimentos reales y lo menos procesados posible. Si va en bolsa, tiene 20 ingredientes y no sabes pronunciar la mitad, probablemente no sea lo mejor para ti ahora.
- Apuesta por alimentos ricos en proteína (huevo, pescado, carne, etc.) para ayudar a regenerar tejidos y musculatura.
- Grasas buenas (aguacate, frutos secos, aceite de oliva virgen extra) para tu energía y salud hormonal.
- Frutas y verduras de temporada, por su aporte en vitaminas, fibra y antioxidantes.
- Agua, mucha agua rica en minerales. Si estás lactando, tus necesidades aumentan, pero incluso sin lactancia, la hidratación ayuda a eliminar toxinas, retención de líquidos y mejorar el tránsito intestinal.
Y algo muy importante: no comas con culpa. Si un día cenas cereales, pizza o lo que haya, no pasa nada. Comer también es autocuidado, y hacerlo en calma (aunque sea cinco minutos) es parte de tu recuperación.
Recuperar la figura no va de contar calorías, sino de alimentar bien a un cuerpo que lo ha dado todo. Cuanto más lo nutras, más herramientas tendrá para repararse.
Autocuidado emocional: porque recuperar la figura también empieza en la cabeza
Pocas veces se habla de esto cuando se trata de recuperar la figura, pero es clave: el cuerpo no se recupera igual si tu cabeza va a mil por hora. El estrés, la falta de sueño, la presión externa (o interna), la autoexigencia y el desbordamiento emocional pueden frenar —y mucho— el proceso de recuperación física.
Después del parto, no solo tu cuerpo ha cambiado. También tu identidad, tus ritmos, tu espacio personal. Estás conociendo a un bebé… y redescubriéndote a ti. Todo eso es un torbellino emocional que no se soluciona con smoothies verdes ni con tablas de ejercicios.

Cuidarte emocionalmente también es cuidarte físicamente
- Dormir cuando puedas (de verdad). Ya sabemos que no siempre es fácil, pero descansar aunque sea en pequeñas siestas puede marcar una diferencia enorme. La reparación muscular, la regulación hormonal y la recuperación del sistema nervioso suceden mientras duermes.
- Habla de lo que sientes. Con tu pareja, tu matrona, una amiga que no juzgue o un profesional si lo necesitas. Guardarte lo que te pesa no ayuda ni a tu mente ni a tu cuerpo.
- Rodéate de personas que sumen. Huye (con cariño) de quienes te presionan para estar “como antes” en dos semanas. Busca tribu, comunidad, gente real que te apoye y te escuche.
- Permítete disfrutar esta etapa sin exigencias. Estás conociendo a tu bebé y construyendo un nuevo vínculo. No necesitas estar perfecta, solo presente.
Porque sí: estar emocionalmente bien también ayuda a que el cuerpo responda mejor. El cortisol (la hormona del estrés) afecta al metabolismo, la retención de líquidos, la energía y hasta al estado de tu piel.
Y no, no se trata de estar feliz todo el rato. Se trata de darte permiso para sentir, para parar, para priorizarte cuando puedas. Porque eso también es salud. También es recuperación. Y también es figura.
No te presiones: vive la maternidad desde la plenitud
Recuperar la figura no es un sprint, es un proceso. Y ese proceso no tiene por qué ser apresurado ni doloroso. La maternidad es un viaje único y, aunque el bienestar físico es importante, el bienestar emocional es clave. Respétate, cuídate y disfruta de esta etapa con tu bebé sin presiones externas.
Si buscas un acompañamiento para sentirte bien durante el postparto, los programas de recuperación postparto de BHealthy te ofrecen apoyo integral, con ejercicios adaptados, consejos nutricionales y bienestar emocional, todo pensado para que vivas esta etapa con plenitud. No se trata solo de recuperar la figura, sino de sentirte bien en cada paso del camino.
Recuerda: no hay una sola forma de recuperar la figura, pero sí muchas formas de amarte en el camino.
