El aumento de la barriga en el embarazo es el cambio más visible, pero ¿qué otros cambios durante el embarazo son los que experimenta la mujer a nivel fisiológico? ¿Qué transformaciones recibe el cuerpo de la embarazada durante los meses de gestación? ¿Qué ocurre por dentro y por qué razón?
¡Ocurren infinidad de cosas! Y es que el embarazo es un proceso de cambios fisiológicos, anatómicos, hormonales y metabólicos que se mezclan unos con otros causando muchos de los síntomas más comunes de las embarazadas: náuseas, dolores de espalda, ardor, reflujo, irritabilidad…
Aunque, ¡ojo! Habitual no quiere decir normal; por lo que llegado el momento, será muy recomendable que te valore una especialista para minimizar al máximo ciertos síntomas.
Volviendo a lo que hoy te trae por aquí: Los cambios durante el embarazo son muchísimos y muy variados y conocerlos te ayudará a estar más tranquila y a empoderarte de tu salud durante los meses que estás creando vida.
Por eso, en BHealthy hemos recopilado todos ellos para que, cuando se produzcan, estés preparada y entiendas qué te está ocurriendo. Eso sí, hay cambios que pueden o no producirse dependiendo de cada mujer, como los relacionados con la piel o el cabello, por ejemplo.
Pero no quiero hacerte spoiler, así que comencemos a ver cuáles son los cambios producidos por el embarazo 😉
EL BAILE DE LAS HORMONAS
Antes de adentrarnos en todos aquellos cambios gestacionales, es necesario que conozcas el papel que juegan las hormonas en todo esto; pues son las causantes de la mayoría de los cambios durante el embarazo y, aunque parezcan las malas de la película, lo que hacen es por tu bien y el del bebé.
Como seguramente sabrás, durante los meses de embarazo, y sobre todo en el primer trimestre de este, surgen una serie de fluctuaciones hormonales que llevan a cabo unos roles determinados. En esta lista no recogemos todas sus funciones ya que son un sinfín, pero para que te hagas una idea de su poder:
- Estrógenos: aumentan causando el agrandamiento mamario y uterino.
- Progesterona: se incrementa su producción para mantener el endometrio y preparar a la mamá para la lactancia, pues estimula el desarrollo mamario.
- Gonadotropina coriónica humana: esta hormona tan solo aparece en el embarazo y es una de las encargadas de mantenerlo.
- Lactógeno placentario: aporta energía al feto y es responsable en el crecimiento del pecho.
- Relaxina: inhibe la actividad uterina, estimula el movimiento pélvico y reblandece el cuello del útero permitiendo la dilatación en el momento del parto.
- Prostaglandinas: afectan la contractilidad del músculo liso pudiendo desencadenar el trabajo del parto al término del embarazo.
- Oxitocina: estimula las contracciones uterinas antes y durante el parto.
A su vez, todas ellas dan lugar a cambios emocionales durante el embarazo como irritabilidad, sensibilidad, cambios de humor, entre otros.
CAMBIOS EN EL CUERPO DURANTE EL EMBARAZO
Teniendo en cuenta lo anterior, debemos pensar que los cambios durante el embarazo a nivel fisiológico y anatómico tienen impacto en la salud cardiovascular, en el tracto gastrointestinal, en el aparato respiratorio y urinario, en el sistema endocrino, en la piel.
Además, se producen afecciones en la alineación corporal y en la posición de los órganos, que se comprimen para dejar espacio al bebé.
Los principales objetivos de todos estos cambios durante el embarazo son el mantenimiento del flujo de nutrientes al feto, la estimulación del crecimiento del útero para la maduración del bebé, el desarrollo mamario y el bienestar de la madre.
Con ello, en el recorrido de los cambios durante el embarazo que vamos a ver a continuación, comprobarás que el cuerpo femenino es absolutamente increíble por la adaptación que realiza en los meses de gestación hasta dar a luz.
¿Preparada para alucinar contigo misma?
¿POR QUÉ TENGO ESTREÑIMIENTO DURANTE EL EMBARAZO?
Aunque las causas del estreñimiento durante el embarazo pueden ser varias, una de las más habituales es la compresión del aparato digestivo debido al aumento del tamaño del útero de la embarazada que, de la misma forma, puede producir ardor y reflujo en el embarazo.
Además, por si esto fuera poco, la hormona progesterona disminuye los movimientos peristálticos del estómago y el intestino, ocasionando un tránsito intestinal más lento que se traduce como estreñimiento durante el embarazo.
En caso de que sufras estreñimiento estando embarazada, te recomiendo que no lo pases por alto: camina, mantente bien hidratada y añade en tu dieta gran variedad de frutas y verduras.
¿QUÉ LE OCURRE AL PECHO Y AL ÚTERO EN EL EMBARAZO?
De sobra sabemos que el pecho crece durante el embarazo y que, además, se encuentra más sensible. Pero no queda ahí; pues las aureolas también aumentan y pueden oscurecerse.
Por su parte, el útero es uno de los órganos femeninos que está expuesto a más cambios durante el embarazo y que, por ello, causa otras alteraciones en el organismo.
Uno de los cambios durante el embarazo que experimenta el útero es el aumento de su tamaño y de su peso; pues de normal el útero pesa alrededor de unos 60 gr y, en el embarazo, puede llegar a los 2 kg de peso.
La hipertrofia del útero se origina por hiperplasia (incremento en la producción de células) de las fibras musculares y por el aumento de la vascularización y angiogénesis (formación de nuevos vasos sanguíneos).
Así, y como te decía antes, esto provoca que el resto de los órganos se contengan unos con otros y se vean afectados de alguna forma, como veremos más adelante.
Más allá de ese aumento de tamaño, otro de los cambios durante el embarazo del útero es el de su forma; ya que, con el paso de los meses de gestación, este se estira, se ablanda, se alarga y se ovala mientras que el bebé se va desarrollando.
CAMBIOS DURANTE EL EMBARAZO QUE REPERCUTEN EN TU ESPALDA
Debido al crecimiento del pecho, del útero y, lógicamente, del feto, el centro de gravedad del cuerpo se desplaza hacia delante repercutiendo en el equilibrio y cambiando la alineación corporal de la embarazada.
Pero ya te había avisado de que el cuerpo de la mujer es muy sabio y se adapta a todos los cambios durante el embarazo, por lo que en este caso no iba a ser menos; y es que, para mantener ese equilibrio, la cadera y las piernas rotan hacia fuera separando los pies.
Esto lo notarás, sobre todo, cuando la barriga ya sea prominente y el momento de dar a luz se acerque, pues es una forma que tiene la fisiología de la mujer a la hora de prepararse y acomodarse para el parto.
No obstante, y aunque el cuerpo intente hacer lo posible durante el embarazo, debes tener en cuenta que cargarás con gran peso y que la lordosis lumbar (aumento de la curvatura lumbar) creará esa anteversión de la pelvis haciendo que, llegado el tercer trimestre, camines con la espalda hacia atrás.
De esta forma, y aunque es algo que se suele dejar de lado, es muy importante que trabajes tu suelo pélvico antes y durante el embarazo, que te mantengas activa y que realices ejercicios que te ayuden a mantener una buena higiene postural.
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PIEL, PELO, UÑAS Y… ¿BOCA? ¡SOS!
¡Pues sí! También se producen cambios durante el embarazo ligados a la salud cutánea, del cabello y bucal. Eso de que a la embarazada solo le crece la barriga y se le hinchan los pies ya va quedando atrás, ¿no crees?
En la piel se pueden dar diferentes cambios durante el embarazo:
- “Paño del embarazo”, “cloasma”, lo que es lo mismo, alteraciones en la pigmentación cutánea por el aumento de los melanocitos que se manifiestan como manchitas.
- Las temidas estrías, que surgen por el estiramiento de la piel y por efecto de nuestras queridas hormonas.
- La línea negra del embarazo que aparece desde el pubis, pasando por el ombligo hasta la zona alta del abdomen y que también se relaciona con los cambios hormonales.
Ya ves que el poder de las hormonas en los cambios durante el embarazo es sorprendente.
En cuanto al cabello y las uñas, quizá sientas que crecen mucho más rápido, pero en el segundo y tercer trimestre tienden a volverse más frágiles y a romperse con más facilidad.
Por último, en relación con la boca, las glándulas salivales están más activas, sobre todo en la segunda mitad del embarazo, las encías se vuelven edematosas y pueden sangrar más fácilmente.
Por tanto, y para minimizar los daños, es fundamental llevar una buena alimentación en el embarazo y cuidar de la salud bucal.
OTROS CAMBIOS ANATÓMICOS EN EL EMBARAZO
Como apuntaba al inicio del artículo, los cambios durante el embarazo son múltiples y se dan en todo el cuerpo de la embarazada; sin embargo, aunque muchos de ellos los padecemos, no llegamos a identificar qué está ocurriendo.
Por eso, vamos a dar un pequeños repaso por las alteraciones metabólicas que experimenta la mujer en el embarazo; de forma que comprendas lo que sucede en tu cuerpo durante los meses de gestación:
- Tiroides: aumenta el metabolismo, el ritmo y la frecuencia cardíaca y se produce vasodilatación e intolerancia al calor.
- Glándulas paratiroideas: aumentan las demandas de calcio y fósforo e incrementan la producción de hormonas en el tercer trimestre.
- Glándulas suprarrenales: en ellas aumenta la producción de corticoides y aldosterona, pudiendo provocar alteraciones en la presión arterial de la embarazada.
- Páncreas: se originan cambios en la producción de insulina, glucosa y glucagón; lo que supone un desequilibrio que puede llevar a la embarazada a padecer diabetes gestacional.
- Aparato respiratorio: el diafragma se eleva aproximadamente 4 cm durante el embarazo evitando que los pulmones se expandan de forma exagerada y se mantenga una frecuencia respiratoria normal. A su vez, la respiración abdominal es sustituida por la torácica y todo esto puede hacer que la mujer, en ocasiones, sienta que le falta el aire y sufra de disnea (dificultad respiratoria), aumentando la fatiga y produciendo cambios en la voz como la ronquera.
- Aparato urinario: aumenta la presión de la vejiga y puede aparecer incontinencia urinaria durante el embarazo; y aquí de nuevo la importancia de fortalecer el suelo pélvico.
¿SABÍAS QUE EL CORAZÓN SE AGRANDA DURANTE EL EMBARAZO?
¡Como lo lees! De entre los cambios durante el embarazo este es uno de los más sorprendentes; aunque tiene sus razones y su lógica.
El crecimiento del corazón en el embarazo se debe al aumento del volumen sanguíneo, a la aceleración del bombeo y al incremento del gasto cardíaco. No obstante, tras el parto el corazón vuelve a su tamaño normal. Además de esto, el corazón también se desplaza por los cambios en el útero de los que ya eres toda una experta.
Por último hay que destacar que, durante la primera mitad del embarazo, suele disminuir la presión arterial; pero a partir de la segunda mitad, regresa a sus niveles óptimos e incluso puede llegar a verse aumentada (preeclampsia).
Antes de despedirme, quiero recordarte que algunos de estos cambios durante el embarazo pueden o no producirse, como aquellos relacionados con el pelo o la boca, por ejemplo, pero que no tienen por qué ocurrirle a todas las embarazadas.
Y que, además, todos ellos están relacionados a nivel fisiológico, anatómico, hormonal y emocional; aunque de estos últimos hablaremos más en profundidad en otro de los artículos de BHealthy 😉
No olvides que una alimentación equilibrada y una rutina de ejercicios adaptados para embarazadas son imprescindibles para disminuir los efectos de esos cambios durante el embarazo.
Espero que empieces el año con una gran sonrisa, con movimiento y con BHealthy… ¡Un abrazo!
